La curiosa anécdota detrás de la primera multa por “exceso de velocidad” de la historia
Un británico que fabricaba autos superó la velocidad máxima de 3,2 kilómetros por hora y fue un escándalo Menuda sorpresa recibió Walter Arnold. No imaginó que, por exceso de velocidad, todo el peso de la ley le caería encima en medio de un plácido paseo
