México, refugio invernal de ballenas: conoce las especies que llegan cada año
La especie más emblemática es la ballena gris, famosa por su sociabilidad con las embarcaciones y su impresionante migración anual, que supera los 15 mil kilómetros. Estas ballenas se pueden observar entre mediados de diciembre y mediados de abril, principalmente en las lagunas Ojo de Liebre, San Ignacio y Magdalena, áreas naturales protegidas que les permiten reproducirse lejos de depredadores y del tráfico marítimo.
Otra visitante frecuente es la ballena jorobada, conocida por sus espectaculares saltos y “cantos” de cortejo. Estas llegan a finales de noviembre y permanecen hasta marzo, principalmente en las costas de Baja California Sur, Nayarit, Jalisco, Colima y Guerrero. Puntos como Los Cabos, la Bahía de Banderas y las Islas Marietas son ideales para su avistamiento.
En menor número también llegan la ballena azul, la ballena de aleta, la minke y el rorcual tropical, que prefieren aguas más profundas del Golfo de California, donde encuentran alimento y zonas tranquilas para sus desplazamientos. En total, México recibe ocho de las 14 especies de ballenas conocidas en el mundo.
Para protegerlas, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) establecen regulaciones estrictas:
• Mantener distancia mínima y límites de embarcaciones según la especie.
• Navegar a baja velocidad para evitar colisiones.
• Prohibición de alimentar o tocar a las ballenas.
• Respetar horarios y zonas restringidas en santuarios.
• Reportar cualquier incidente como colisiones o enmallamientos.
Estas medidas, junto con campañas de sensibilización, buscan equilibrar la protección de los animales con el turismo responsable que generan. Cada invierno, la llegada de las ballenas recuerda la riqueza natural de México y la responsabilidad de conservar uno de los espectáculos más impresionantes de la naturaleza.
