Irán advierte con “una dura bofetada” a EE.UU. ante nuevas amenazas
Irán ha lanzado una advertencia directa a Estados Unidos, prometiendo una contundente respuesta si Washington persiste en su actitud hostil hacia Teherán. El líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jameneí, aseguró este viernes que cualquier acción agresiva contra la nación islámica será enfrentada con determinación.
“Los estadounidenses deben entender que las amenazas no les servirán de nada frente a Irán”, declaró Jameneí. “Si intentan hacer algo maligno contra nuestra nación, recibirán una dura bofetada”, afirmó el líder iraní en un mensaje contundente.
Ultimátum de EE.UU. y respuesta iraní
Por su parte, Brian Hughes, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de EE.UU., reveló que Donald Trump envió recientemente una carta a Jameneí en la que expresó su deseo de resolver la disputa sobre el programa nuclear iraní mediante la vía diplomática. Según Hughes, Trump dejó claro que, de no alcanzarse un acuerdo en un plazo de dos meses, Washington consideraría “otras formas” para abordar el conflicto.
El medio Axios informó que la carta del mandatario estadounidense establece un ultimátum para la negociación de un nuevo acuerdo nuclear. Trump, al anunciar la misiva, enfatizó que espera que Irán opte por el diálogo, pues un acuerdo sería “mucho mejor” para el país. Sin embargo, advirtió que, en caso contrario, “tomarían medidas” para evitar el desarrollo de armas nucleares.
Irán rechaza presiones y mantiene postura firme
Jameneí respondió con firmeza a la propuesta estadounidense, rechazando cualquier intento de imposición. “La insistencia de algunos gobiernos matones en promover negociaciones no busca resolver los problemas, sino imponer sus propias expectativas”, declaró el ayatolá.
El líder iraní dejó claro que la República Islámica no cederá ante presiones y continuará defendiendo sus intereses soberanos. Además, el ministro de Relaciones Exteriores de Irán reafirmó que no habrá diálogo con Washington mientras persista la política de “máxima presión” impulsada por Trump.
En un contexto de tensiones crecientes, la posibilidad de una resolución pacífica parece depender de la disposición de ambas naciones para encontrar un terreno común. Sin embargo, con declaraciones cada vez más desafiantes, el camino hacia la diplomacia luce cada vez más incierto.
