MC impulsa voto juvenil desde los 16 años en México
Movimiento Ciudadano (MC) buscará que en la próxima reforma electoral se reduzca la edad mínima para votar, de 18 a 16 años, con el propósito de empoderar a las juventudes e incorporarlas en los procesos democráticos del país.
El coordinador de MC en el Senado, Clemente Castañeda, afirmó que esta medida reconoce a los jóvenes como sujetos políticos de derecho. Recordó que en países como Alemania, Australia, Escocia, Brasil, Argentina y Ecuador ya se permite ejercer el voto a partir de esa edad. “A las juventudes les exigimos mucho y las atendemos poco; nos parece que esta es una buena manera de reconocerlas como actores políticos”, señaló.
El legislador subrayó que en México los jóvenes de 16 y 17 años tienen la posibilidad legal de trabajar y pagar impuestos, por lo que resulta justo que también puedan participar en las decisiones democráticas que impactan en temas como educación, medio ambiente, salud y deporte.
La propuesta de MC, explicó Castañeda, se plantea como parte de un enfoque integral para fortalecer la participación política de las juventudes y ampliar sus derechos cívicos, permitiendo que el voto a los 16 años sea un paso hacia su inclusión plena en la vida pública.
Debate sobre la reforma electoral
El senador advirtió que si la reforma electoral se diseña únicamente desde la cúpula del poder, existe el riesgo de que se conserve un sistema que favorezca privilegios en lugar de ampliar la democracia. Subrayó que persisten problemas graves como la violencia en campañas, el financiamiento ilegal de candidaturas y la falta de equidad en los procesos electorales. “Si no se atienden estos problemas, la reforma no tiene razón de ser”, aseguró.
MC presentará en los próximos días su visión integral sobre el sistema electoral, en la que se incluye esta propuesta y otros planteamientos para impulsar la participación de los jóvenes en la vida política del país. Para el partido, la incorporación del voto juvenil desde los 16 años no solo es un derecho, sino también una oportunidad para enriquecer la democracia mexicana con nuevas voces y perspectivas.
Castañeda concluyó que empoderar a las juventudes significa reconocer que están en condiciones de involucrarse activamente en la vida pública y elegir a sus representantes, fortaleciendo con ello el futuro democrático del país.