Las partes de las carnitas con más colágeno que ayudarán a tus articulaciones

Las carnitas ofrecen beneficios nutricionales, especialmente por alto contenido en colágeno. La carnita tiene un aporte proteico esencial para la salud del pelo, la piel, las uñas, los huesos, las articulaciones, los vasos sanguíneos y los intestinos. Así que a comer muchos taquitos, estas son las partes de las carnitas con más colágeno.

La cocción lenta permite que la carne libere colágeno, beneficiando significativamente a quienes las consumen.

Partes de las carnitas con más colágeno

Toma nota que de ahora en adelante tendrás una buena excusa para pedir más taquitos de estas partes de las carnitas.

  • Piel del cerdo: La piel es rica en colágeno y una de las partes más valoradas en la preparación de carnitas. Al cocinarse, parte del colágeno se convierte en gelatina, proporcionando una textura suave y gelatinosa que hace únicos esos tacos de cueritos.
  • Orejas: Las orejas de cerdo contienen una gran cantidad de piel y cartílago, lo que las hace ricas en colágeno. Su cocción le da una textura crujiente y un sabor distintivo.
  • Cachete (cabeza): Esta parte contiene mucho tejido conectivo y piel, convirtiéndola en una fuente significativa de colágeno. Además, aporta una textura jugosa a las carnitas.
  • Pata de cerdo: Al igual que las orejas, las patas son ricas en colágeno debido a la presencia de tendones, piel y tejido conectivo, liberando colágeno al cocinarlas lentamente. Además, las puedes comer en escabeche o capeadas.
  • Espinazo: Esta parte incluye huesos y tejido conectivo, proporcionando una buena dosis de colágeno y contribuyendo al sabor y la textura de las carnitas.

Beneficios del colágeno

El colágeno desempeña muchas funciones diferentes en el cuerpo, por ejemplo ayuda a reforzar los huesos, permite que la piel y los tendones se estiren y ayuda a la curación después de sufrir una lesión.

Nuestro cuerpo tiene varios tipos diferentes de colágeno. El más importante es el colágeno tipo I, que se encuentra en los huesos y en los tendones. Pero también tenemos el colágeno tipo II, que se encuentra en el cartílago, el material flexible de la nariz, la orejas y las articulaciones y colágeno tipo III, que se encuentra en la piel, el revestimiento de los vasos sanguíneos y los intestinos.

Créditos: animalgourmet

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