Cuál es el infalible método japonés que los expertos recomiendan para ser más organizados

  • Su principio se basa en poder lograr pequeñas mejoras pero sostenibles en el tiempo

 

Sin duda los japoneses son un modelo a seguir en cuanto a organización y productividad se trata, debido a que son una cultura muy disciplinada y con un gran gusto por el orden.

 

Es por eso que son ellos los creadores de un infalible método que si se aplica en la vida diaria puede ayudar a mejorar el orden en el hogar y en la vida general. Se trata del llamado método Kaizen, el cual es una filosofía y práctica de gestión que se centra en la mejora continua.

 

La palabra Kaizen proviene de las palabras japonesas “kai” (cambio) y “zen” (mejor) y se aplica tanto en el ámbito personal como en el profesional pues algunas empresas lo aplican en su filosofía para aumentar la producción.

 

En este sentido, el método Kaizen se basa en la idea de que pequeñas mejoras incrementales pueden resultar en un impacto significativo a largo plazo por lo que ayuda a las personas a reducir la ansiedad que suele causar el pensar en grandes objetivos.

 

De acuerdo con los especialistas, este método permite dividir esas grandes metas en pequeños objetivos más manejables y sostenibles en el tiempo que en algún punto se convierten en esas grandes metas del principio.

 

Para aplicar la filosofía Kaizen y mejorar la organización personal, los expertos recomiendan aplicar los siguientes consejos:

 

  1. Establece metas pequeñas: Divide grandes tareas en objetivos más pequeños y manejables. Esto facilita el progreso y hace que las mejoras sean alcanzables diariamente.
  2. Prioriza tareas: Identifica las tareas más importantes y urgentes. Crea listas diarias y ordénalas por prioridad para centrarte en lo esencial.
  3. Revisa y ajusta: Dedica tiempo cada semana para revisar tus logros y ajustar tus estrategias. Evalúa qué métodos funcionan mejor y cuáles requieren modificaciones.
  4. Elimina distracciones: Analiza tu entorno y rutina para identificar distracciones. Implementa cambios para minimizar interrupciones y optimizar tu tiempo.
  5. Organiza tu espacio: Mantén tu entorno de trabajo ordenado. Dedica unos minutos cada día a organizar tus herramientas y documentos, facilitando así el acceso y reduce el desorden.
  6. Implementa la regla de los dos minutos: Si una tarea se puede completar en menos de dos minutos, hazla de inmediato. Esto ayuda a evitar la acumulación de pequeñas tareas.
  7. Desarrollo de hábitos: Introduce mejoras incrementales en tus hábitos diarios, como establecer una rutina matutina eficaz, para fomentar la organización continua.
  8. Feedback personal: Reflexiona sobre tu rendimiento y busca formas de mejorarte. Utiliza diarios o aplicaciones para medir avances y obtener retroalimentación constante.
  9. Celebración de logros: Reconoce tus mejoras, por pequeñas que sean. Esto te motiva a continuar buscando la eficiencia y el orden.

Fuente: infobae

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